En cualquier país del mundo te entenderán si gritas la palabra taxi; el taxi es un vehículo de transporte público con una autorización de transporte y una licencia de operación con las cuales un conductor ofrece los servicios de transporte a uno o varios pasajeros dirigidos a igual o diferentes destinos con el pago de una cantidad de dinero producto de la aplicación de tarifas reguladas.
En el caso del taxi, a diferencia de los otros tipos de transporte de personas, como son el metro, tranvía o el autobús, el servicio ofrecido por el taxi se caracteriza por ser puerta a puerta ya que el usuario determina el destino.
El taxi es un medio de transporte que debe permitir desplazamientos rápidos, confortables y directos a cambio del pago del servicio de transporte prestado. Provee un servicio flexible y conveniente, por lo que es uno de los sistemas de transporte no subvencionado.
En referencia a los taxis del mundo se pueden comentar estas curiosidades: los Hackney Carriage presentes en Londres desde 1962 son considerados los taxis más bonitos y en esta ciudad los taxistas tienen que superar un examen en el que memorizan más de 3.000 rutas distintas, por lo que ellos consideran que es una cuestión de honor llevarte a cualquier rincón de la ciudad.
Los taxis de Nueva York son los más famosos del mundo, su color es el amarillo y han protagonizado escenas míticas del cine.
En París los taxistas tienen el derecho de admisión y pueden negarse a tomar pasajeros si hay algo en ti que les resulta molesto.
En Moscú sólo hay un taxi por cada 2.500 habitantes, pero en compensación cualquier vehículo puede convertirse en taxi.
En Tokio, los taxis están totalmente automatizados, es muy importante saber que las luces en este país funcionan al revés; la luz roja significa libre y la luz verde ocupado.
La velocidad es la característica principal de los taxistas en Estambul, si visitas esta ciudad prepárate para circular a una velocidad de vértigo.
En Roma es muy común que diferentes personas irrumpa en tu taxi pidiendo una ruta distinta a la tuya y exigiendo una compensación por bajarse y dejarte hacer la tuya.
La inseguridad en México ha provocado que existan servicios de transporte solo para mujeres en algunas zonas.
En Pekín los taxis tienen muy regulada su longitud y cilindrada pero no su color.
En la ciudad de Ámsterdam existe un certificado de buena conducta para los taxistas, que generalmente lo exhiben orgullosos.
En Santo Domingo existen tantas licencias de taxis que estos llenarían totalmente las calles de la ciudad. Por este motivo, solo sale uno de cada dos taxis al día y para diferenciarlos van pintados unos de blanco y otros de mamey (anaranjado).
En La Habana puedes encontrar los taxis conocidos como almendrones que son vehículos clásicos americanos de los años 50.
Esta última curiosidad de los vehículos sumamente antiguos de los años 1950 empleados como taxis en Cuba, dio lugar al desarrollo de este escrito con unos casos diametralmente diferentes en Marruecos y en Venezuela.
Marruecos es un país soberano situado en el Magreb, al norte de África, con costas en el océano Atlántico y el mar Mediterráneo independiente desde el 25 de marzo de 1956 de España y Francia. Se encuentra separado del continente europeo por el estrecho de Gibraltar.
El turismo en Marruecos está bien desarrollado, con una fuerte industria turística centrada en el país, la cultura y la historia. Marruecos ha sido uno de los países políticamente más estables en el norte de África, lo que ha permitido que el turismo se desarrolle.
Marruecos en el año 2013 se convirtió en el país más turístico de África al alcanzar el umbral simbólico de 10 millones de visitantes. Para los años del 2020 a 2022, Marruecos ha fijado la meta de llegar a 20 millones de turistas, para estar en el "Top 20 destinos en el mundo".
Para ello Marruecos cuenta con nueve sitios declarados patrimonio de la Humanidad por la Unesco, siendo los destinos más visitados Rabat, Casablanca, Marrakech, Fez y Tánger.
Puede que sean los últimos dinosaurios de Marruecos, pero va a costar que se extingan. Ellos forman parte del paisaje del país como las montañas del Atlas, las arenas del desierto, las medinas, los zocos y las mezquitas. Lo primero que un visitante observa nada más llegar al puerto de Tánger o al aeropuerto de Casablanca son las largas hileras de taxis en posición de espera. Y la inmensa mayoría de ellos son de un único modelo: el Mercedes 240 diesel.
Desde el comienzo de su fabricación, a mediados de los ochenta, este modelo, embajador de la deutsche Qualität, se hizo con el mercado del taxi en Marruecos. Se calcula que más de 40.000 de los 55.000 taxis que existen en este país son Mercedes 240D.
Duro, infatigable, con capacidad para siete viajeros y el conductor, estos coches han recorrido millones de kilómetros, en verano o invierno, sin estropearse nunca y sin dar síntomas de fatiga.
Las autoridades marroquíes quieren modernizar este parque automovilístico de taxis y para ello lanzó hace cinco años un plan de incentivos para que los taxistas cambiaran sus viejos Mercedes por modelos más modernos, cómodos y ecológicos.
La contaminación del aire es uno de los graves problemas que padece Marruecos, y la inseguridad vial. Más de cuatro mil personas mueren cada año en las carreteras y otros quince mil sufren heridas.
El conductor marroquí parte de la premisa básica de que las calles y carreteras son suyas, por lo que no duda en poner en peligro a peatones y ciclistas, sobrepasar los límites de velocidad o ignorar la distancia de seguridad. En un país donde las carreteras son malas y donde se conduce de manera insolente, en la opinión de los conductores el Mercedes 240D es una garantía para el taxista y para los viajeros. Ellos consideran al Mercedes 240D como un carro de combate, que pueden superar recorridos de más de tres millones de kilómetros teniendo averías mínimas con piezas de repuesto muy fáciles de conseguir y en cualquier taller de Marruecos te puede hacer la reparación por poco dinero. La mayoría de los taxis son Mercedes 240 pero también hay de otros modelos como las series 200, 250 o 300 que poseen la misma carrocería y el mismo motor de 4 pistones, cuyas piezas son intercambiables.
De momento, la campaña no está teniendo mucho éxito. Son muy pocos los taxistas que han cambiado su viejo Mercedes por otro vehículo. En Casablanca, por ejemplo, existen unos 8.000 grandes taxis, casi todos ellos Mercedes, que transportan diariamente a unas 100.000 personas y suponen el sustento principal de 36.000 familias.
Maracaibo es una ciudad en el noroeste de Venezuela, en la orilla occidental del estrecho que conecta el lago Maracaibo con el Golfo de Venezuela. Es la segunda ciudad más grande de Venezuela, después de la capital nacional, Caracas, y la capital del estado de Zulia. La población de la ciudad es de aproximadamente 5 millones de habitantes en su área metropolitana.
El sistema de transporte público de Maracaibo se diversifica bajo una corta línea de metro, autobuses, busetas, “carrito por puesto” y taxis. Con ellos se atienden diversas rutas en toda la ciudad y rutas extraurbanas como la ruta Maracaibo a la fronteriza ciudad de Maicao en Colombia.
Los “carrito por puesto” dan servicio en la mayoría de las rutas de transporte de la ciudad de Maracaibo, son automóviles de cinco puestos que rondan entre 20, 30 y hasta 40 años de edad de uso y funcionamiento.
El costo de la tarifa regulada por el municipio dependiendo que cerca o lejos vaya el usuario, a estos lo llaman “pasaje corto” y “pasaje largo”.
Estos medios de transportes ofrecen un servicio en condiciones deplorables: carros deteriorados, puertas que no cierran, olor a gasolina, asientos desgastados, entre otros. Sin embargo, los carritos por puesto son los más usados y preferidos por el público marabino.
Esta modalidad de transporte público fue iniciada en la ciudad a partir de 1920, con la aparición del petróleo y la llegada de automóviles al país.
El tráfico por la ruta Maracaibo-Maicao ha aumentado hasta el colapso en los últimos años como una respuesta a la migración, incursiones temporales de personas para el abastecimiento de alimentos, medicinas y otros insumos y por el contrabando de gasolina y otros productos, todos en la dirección de Venezuela a Colombia. El sistema de transporte más utilizado es el de los carritos por puesto que atienden a usuarios hasta la frontera en el puesto de Paraguachón o hasta la ciudad de Maicao.
Estos carritos por puestos son especies de taxis colectivos constituidos por vehículos de los años 1970 y 1980, de más de 40 años de uso. Preferencialmente son vehículos americanos grandes Chevrolet Impala, Caprice, Malibu y Ford LTD y Grand Marquis, la mayoría de ellos con modificaciones para incorporar un tanque adicional de gasolina con el propósito de disponer de los volúmenes sobrantes en el mercado informal de Colombia.
La fortaleza de estos vehículos ya ha sido sobrepasada por el exceso en recorridos en el trayecto que toma tres horas sin los comunes retardos y por la utilización de caminos de tierra conocidos como trochas las cuales se convirtieron en pasos obligados por el cierre del tránsito vehicular en la vía principal por orden del gobierno de Venezuela.
Son 180 trochas que existen a lo largo de los 249 kilómetros de frontera terrestre que tiene el departamento de La Guajira con Venezuela.
Si la capital del Estado Zulia por más de un siglo creció con la mirada en su emblemático Lago, por donde llegaron la electricidad y el cine a Venezuela, la vista actual está puesta en la frontera, a donde se trasladan diariamente miles de personas para buscar en Colombia lo que no consiguen en su país.
De acuerdo con cifras del Gobierno colombiano, son más de 870 mil venezolanos y retornados los que han llegado a Colombia en el último año.
Recopilación de la Información y Restructuración por Antonio Jimenez.
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