Amigos ficticios:
En un tiempo de los años 1970, mis padres se dedicaron a la venta de ropa y demás artículos confeccionados, bajo la modalidad del pago por cuotas. Mi papá era el dueño del capital y aportaba la mercancía y mi mamá era una de los empleados en mercadeo, venta y cobranza de las obligaciones.
Resulta ser que, a mi mamá, se le presentaron unos gastos imprevistos que superaron el presupuesto doméstico y la solución fue tomar parte de los pagos de las deudas de los clientes, creando un hueco financiero que esperaba en algún momento compensar. Para evitar caer en conflictos por el préstamo, se la ingenió para tener dos clientes ficticios, Ana y Margarita, que pasaron a ser las deudoras morosas. Las deudas serian honradas, aunque no recuerdo si fue así o se declararon perdidas. Mis tres hermanas y yo fuimos cómplices de mi mamá y muchas veces, ante la instrucción enérgica de mi papá, salíamos a cobrarle a Ana y Margarita, nos distraíamos para ocupar el tiempo de la diligencia y regresábamos con las manos vacías pero con una promesa del pago para más adelante.
Nuestra imaginación es tan poderosa que es capaz de crear personajes con el mismo poder que un ser real, son miles los personajes que han marcado a generaciones enteras y son parte de la imaginería mundial. El personaje ficticio que ha ejercido fuertemente sobre la sociedad moderna, y que hoy forma parte indiscutible de cualquier cultura influida por occidente, es Santa Claus o San Nicolas, un personaje infantil de origen folclórico, muy popular en las culturas occidentales, que trae regalos a los niños la noche del 24 de diciembre.
La atracción a los dibujos animados, personajes de videojuegos, series, libros o cómics también se han convertido en el deseo sexual de algunas personas, un fenómeno que es conocido como ficciofilia, que provoca que las personas se sientan atraídas por un amor imposible e irrealizable hacia los personajes ficticios.
Uno de mis amigos de los años 1970, tenía una obsesión visual hacia el principal personaje femenina de la famosa tira cómica Mandrake el mago, la cual venía siendo publicada desde el año 1934, convirtiéndose en el primer superhéroe de los cómics. De sus personajes secundarios, los más importantes eran, el príncipe de las siete naciones, Lotario, y la princesa de la nación ficticia europea de Cockaigne, llamada Narda, quien era la favorita de mi amigo.
Narda y Mandrake, aunque estuvieron muy enamorados desde el inicio del comic, mantuvieron su soltería por más de 60 años y solo se casarían en 1997. En esta larga soltería, quizás la obsesión de mi amigo tuvo su influencia sin ninguna duda.
Los amigos ficticios en la actualidad no están ya en la imaginación de algunas personas, sino en las redes sociales. La expansión viral que llega a todos los lugares del mundo de forma rápida es perfecta si vendes un producto, una imagen o te interesa que algo se difunda como la pólvora. Algún desconocido pide ser tu contacto por que tiene contactos similares y los aceptas de un solo teclazo y así en las redes se publican hasta las fotos de tu entorno familiar más cercano. Así acumulas amigos que no conoces y que aumentan según sea tu ego que se nutra de los likes, me gusta o que me comenten.
Hurra, vamos a la playa:
Solo el anuncio de que iríamos a la playa era un motivo de indescriptible emoción para todos en mi familia. El paseo era regularmente los días domingo y se iniciaba con un operativo para cargar al vehículo de sillas plegables, hamacas, radio transistor, bebidas refrescantes y la comida que pasaba por ser un suculento almuerzo.
El paisaje del recorrido hacia las playas del Distrito Mara en el Estado Zulia era espectacular desde la salida de la casa. El transito por las avenidas La Limpia o Las Delicias continuaba con el paso por el barrio Ziruma de indígenas Wayuu y en donde estaba la frontera imaginaria que representaba la salida del entorno de la ciudad. No muy alejado de allí, se llegaba a Puerto Caballo y su famoso puente sobre un caño que daba inicio a una ciénaga con la existencia de manglares que finalizaban en Santa Cruz de Mara, una instalación petrolera en donde existía un puerto de embarque y unos tanques de petróleo de la empresa Shell. Enseguida se llegaba a la ansiada playa del lago elegida para el paseo.
Recuerdo a Las Palmeras, Las Mercedes, Los Cocos, La Playa Universidad, etc. Todas ellas con la misma topografía, un acceso irregular de vías de tierra suelta que podían provocar el atascamiento del vehículo, la cerca de alambres de púas, la caseta de vigilancia con un goajiro armado de un machete que cobraba por el ingreso del carro y luego una enramada de palmas de coco en la orilla del lago.
Mi mamá solía preparar un menú único que añoro al día de hoy, un arroz con pollo con las piezas del pollo cortadas con su pedazo de hueso incluido, acompañándolo con ensalada tipo rusa, pancitos de fiesta y la gaseosa, generalmente coca cola. El arroz con pollo se iba a la playa contenido en la misma paila en donde se preparó y por seguro que eso le daba más gusto. El apetito en la playa generalmente se multiplicaba y después de un almuerzo generoso teníamos un receso obligatorio de por lo menos una hora antes de volvernos a meter al agua. Se pasaba un día espectacular, sin dudas.
Al final del día al recoger las cosas, quitarse la arena de encima, cambiarse de ropa y hasta montarse al carro ya no era con el mismo entusiasmo. La expresión facial de vamos a la playa era muy diferente a la de venimos de la playa. Al llegar a la casa, el complemento del baño y la embadurnada con leche de magnesia era ideal para aliviar la enrojecida piel.
El desarrollo de la Región Zuliana trajo consigo también una explotación masiva del lago de Maracaibo de forma irresponsable. La lemna o lenteja de agua es una planta acuática que crece en ambientes ricos en nitrógeno, elemento que en forma orgánica ha sido incorporado al lago de Maracaibo, principalmente a través de las aguas negras sin tratamiento.
La lemna produce grandes cantidades de amonio, metano y otros compuestos cuya saturación provoca la eutrofización de las aguas afectando la composición de la comunidad de los seres vivos. La calidad de las aguas se ha deteriorado y en algunos puntos el agua presenta niveles de contaminación muy peligrosos para la salud. Las playas del Distrito Mara están todas prohibidas para el baño desde hace varios años quitándole a los zulianos uno de sus principales pasatiempos en unión familiar.
Recopilación de la Información y Restructuración por Antonio Jimenez.
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