El término mago proviene del persa antiguo magi, un magi era el miembro de una tribu de la antigua Media que se ocupaba de las prácticas religiosas y funerarias. En su rito religioso vertían libaciones de leche, aceite y miel sobre una llama y al mismo tiempo entonaban rezos y canciones. Llevaban vestiduras blancas, tiara, y en la mano un haz de ramas de tamarisco. En en el siglo I fueron reconocidos como hombres sabios y científicos. Los personajes llegados de Oriente y mencionados en la Biblia eran magos en el sentido original del término, esto es, sacerdotes persas; pero más tarde fueron llamados reyes magos en algunas tradiciones cristianas aunque sin ninguna evidencia histórica sobre su realeza.
El cambio de significado del término, que pasa a designar a alguien que practica la magia o hechicería, se debe a la asimilación que la Iglesia hizo de las creencias y rituales religiosos no cristianos con la brujería y prácticas similares.
En un sentido muy diferente, en épocas recientes el título de "Mago" se ha asignado a los artistas que practican el ilusionismo, es decir a quienes realizan juegos para crear ilusiones visuales o en cualquiera de los sentidos, simulando poderes especiales, con objetivos recreativos.
El dragón es uno de los más grandes y conocidos seres mitológicos de toda la historia. La palabra dragón deriva de una palabra griega que en origen hace referencia al poder fascinante e hipnótico de la mirada de la serpiente. Aunque aplicada en un principio a serpientes reales, pronto se utilizó también para referirse a aquellas dotadas de características imaginarias (enorme tamaño, capacidad de arrojar fuego por la boca, etc.) que aparecen en cuentos, leyendas y mitos.
El dragón mitológico desempeña un papel importante como dios o guardián, o como monstruo y poderoso enemigo. Se le atribuyen cualidades positivas, como una gran sabiduría y conocimiento, pero también defectos, como una avaricia y codicia insaciables que le conducen a devastar poblaciones enteras para apilar gigantescos tesoros.
El término dragón también ha sido utilizado en el área militar. Los dragones militares eran soldados que, desde mediados del siglo XVI hasta principios del XIX, combatían como caballería (generalmente al ataque) e infantería (a la defensiva normalmente).
En el ejército británico se llamó dragones ligeros a los regimientos de caballería ligera de fines del siglo XVIII instruidos en misiones de reconocimiento, combate en escaramuzas y en otras labores que requieran rapidez. A principios del XIX se convirtieron en lanceros y actualmente los llamados Dragones de Westminster están especializados en guerra nuclear, bacteriológica y química.
En el ejército de Estados Unidos hubo cuerpos de dragones ya desde su Guerra de Independencia. En 1836 se creó como unidad de caballería el Segundo Regimiento de Dragones, hoy en día denominado 2º Regimiento de Caballería Acorazada, también conocido como "Segundo de Dragones". En la Guerra de Secesión ambos bandos emplearon la caballería como unidad de reconocimiento y de infantería montada.
En la mitología griega, los titanes (masc) o titánides (fem) eran una raza de poderosas deidades que gobernaron durante la legendaria edad de oro.
Los titanes fueron doce y luego fueron 13 por el desdoblamiento de la titánide Tea.
Los titanes estaban relacionados con diversos conceptos primordiales, algunos de los cuales simplemente se extrapolaban de sus nombres: el océano y la fructífera tierra, el Sol y la Luna, la memoria y la ley natural. Los doce titanes de la primera generación estaban encabezados por el más joven, Cronos (Tiempo), quien derrocó a su padre Urano (Cielo) a instancias de su madre, Gea (Tierra). Posteriormente, los titanes engendraron una segunda generación, destacando los hijos de Hiperión (Helios, Eos y Selene), las hijas de Ceo (Leto y Asteria) y los hijos de Jápeto (Prometeo, Epimeteo, Atlas y Menecio).
Los titanes precedieron a los doce dioses olímpicos, quienes, guiados por Zeus, terminaron derrotandolos en la Titanomaquia (guerra de los titanes). La mayoría de ellos fueron entonces encarcelados en el Tártaro, la región más profunda del inframundo.
También en la mitología griega, los Cíclopes eran los miembros de una raza de gigantes con un solo ojo en mitad de la frente.
Hesíodo describió a tres cíclopes de un solo ojo que servían como constructores, herreros y artesanos e hijos de Urano y Gea, hermanos de los Titanes. Homero describió otro grupo de cíclopes, hijos de Poseidón. En la Teogonía de Hesíodo, Zeus libera tres cíclopes del pozo oscuro del Tártaro y estos proporcionan el rayo de Zeus, el casco de invisibilidad de Hades y el tridente de Poseidón, y los dioses usan estas armas para vencer a los Titanes.
En un episodio de La Odisea de Homero, el héroe Odiseo se encuentra con el cíclope Polifemo, hijo de Poseidón y Thoosa, que vive con sus compañeros cíclopes en un país distante. Estrabón describe otro grupo de siete cíclopes originarios de Licia, que habían construido las murallas de Tirinto y tal vez las cavernas y los laberintos cerca de Nauplia, a los que se llamaba muros ciclópeos.
El Ku Klux Klan son unas siglas de difícil definición, aunque se conoce que el vocablo “kuklos” proviene del griego y se puede interpretar como “circulo” y el vocablo “Klan” es de origen escocés. Otras definiciones o interpretaciones sería la deformación del vocablo “kukulkán” el dios azteca de la luz, y para otros sería solo una onomatopeya de ¡Kill, Kill, Kill! o sea “Mata, Mata, Mata.
El Ku Klux Klan (KKK) es el nombre adoptado por varias organizaciones de extrema derecha en los Estados Unidos quienes promueven principalmente la supremacía de la raza blanca y, por tanto, el racismo, la xenofobia y el antisemitismo, así como la homofobia, el anticatolicismo y el anticomunismo. Con frecuencia, estas organizaciones han recurrido al terrorismo, la violencia y actos intimidatorios como la quema de cruces, para imponer su criterio y oprimir a sus víctimas.
El KKK ha tenido tres encarnaciones, el original fue fundado en 1866 por seis soldados confederados en un club social de Tennessee, y al año siguiente celebró su primera gran reunión, en la que se establecieron como “el Imperio invisible del Sur”.
Su primer líder fue el general confederado Nathan Bedford Forrest, quien lideró una masacre de soldados de la unión, principalmente negros.
El KKK contaba con una organización fuertemente jerarquizada, en la cabeza de la organización estaba el Gran Mago o Brujo del Imperio Invisible que ejerce su autoridad sobre todo el territorio de los Estados Unidos. Después, descendiendo en la jerarquía, estaba un Gran Dragón por Estado, un Gran Titán en cada Distrito, un Gran Gerente por Condado y un Gran Cíclope por Klavern o Guarida, la célula base. Los miembros del Klan se dividen en Águilas y Caballeros y estos últimos eran los encargados de las expediciones de castigo.
Esos pomposos títulos aunque pueden parecer ridículos estaban diseñados para asustar e impresionar a los negros, dado que se sabía de su grado de superstición. Las descripciones de los títulos para los puestos de la organización, presentadas al inicio de este escrito parecen confirmar lo inteligente de la organización. El líder del país pasaba por ser un rey sabio, científico, brujo o hechicero con poderes especiales; a el líder de cada Estado se le asemejaba al Dragón con sus competencias antagónicas de actuar como guardián o protector a ser un monstruo con el manejo del fuego y experto en la táctica militar y ya a nivel local a los titanes y los cíclopes se les conferían unos poderes especiales, rápida actuación, invisibilidad y eficiencia en la construcción y ampliación del grupo.
Sin embargo, cuando el poder de la intimidación fallaba no se dudaba en recurrir a otros métodos más violentos. En efecto, el K.K.K. no tardó mucho en degenerar en una agrupación de terroristas y sádicos que causó infinidad de atropellos y hechos delictivos.
Los hábitos rituales y su ropaje eran un complemento de todo esto, y se dice que los diseñó una hermana de uno de sus fundadores: larga túnica blanca, ceñida por una cuerda, capirote puntiagudo a la manera de los penitentes españoles que puede llevarse alzado por encima de la frente, o bien ocultando todo el rostro.
En su época inicial abundan los ataques contra escuelas e iglesias atendidas por negros, y contra los primeros cargos públicos de esa raza elegidos en las convenciones constitucionales de 1867 a 1868; el 10 por ciento de ellos sufrió atentados, y al menos siete fueron asesinados.
En ese entonces adoptaron además de su vestimenta de túnicas con capuchas blancas a la noche como campo de acción. Su impunidad quedaba reforzada por la falta de testigos, nadie hablaba, bien por miedo o por complicidad tácita, los hechos de violencia fueron tan bárbaros que el general confederado, Nathan B. Forrest, decidió disolver el clan en 1869, pero algunas células del grupo extremista continuaron actuando. El presidente Ulysses Grant ordenó ‘cazar’ a los miembros del Ku Klux Klan que seguían haciendo manifestaciones violentas. El KKK fue formalmente disuelto por el presidente republicano Ulysses Grant, a través del Acta de derechos civiles de 1871.
En 1915, el KKK resurgió, aprovechándose del miedo a la inmigración masiva, añadiendo a sus objetivos a los católicos y a los judíos y la cruz en llamas se incorporó como símbolo. El triunfo del comunismo en Rusia los impulsó siendo la época de su mayor esplendor, con cuatro millones de miembros y manifestaciones frente a la Casa Blanca.
El segundo KKK fue una organización más formal, con miembros registrados y con una estructura estatal y nacional.
El FBI da cuenta de que sus crímenes por creencias fanáticas eran despreciables, colgaduras, flagelaciones, mutilaciones, secuestros, marcas de ácido y quemas cruzadas.
Sus métodos fueron más despiadados para entonces. La fuerza del KKK era imponente hasta en las esferas políticas, pero la captura de miembros poderosos y fuertes campañas en medios de comunicación en su contra mermaron sus alcances a finales de la década del 20 y originó un rápido declive. Su popularidad comenzó a caer en la Gran Depresión de 1929 y durante la Segunda Guerra Mundial, ya que algunos miembros destacados del KKK protagonizaron escándalos por apoyar a la Alemania nazi.
El KKK volvió a aparecer en la década de los 60, sobre todo en los Estados del Sur, como consecuencia de las nuevas leyes contra la segregación racial.
Hoy, aunque lejos de sus "tiempos de gloria", el KKK sigue activo, con un número de miembros que oscila entre 4.000 y 10.000, según las fuentes consultadas, y facciones muy divididas. Celebran convenciones, publican revistas, alimentan de contenido sus páginas web y hacen declaraciones a la prensa. Los atentados yihadistas les sirven de combustible para reclutar nuevos miembros, basándose ahora en el miedo al Islam.
Sin relación con el crimen organizado, pero sí con otros tipos de actividades criminales, y como sociedad secreta en sus principios, hoy actúa a cara descubierta y sus acciones se limitan a aprovecharse del derecho a la libertad de expresión que garantiza la Constitución de los Estados Unidos para seguir propagando su mensaje de odio.
El Imperio Invisible no ha desaparecido y continúa luchando por la Raza Blanca hasta nuestros días. Don Black, un antiguo Gran Mago del KKK, se ha dedicado a la creación del primer sitio en Internet llamado Stormfront y David Duke, antiguo líder de los Caballeros del KKK en el año 1988 se presentó como presidente y obtuvo un gran reconocimiento y en 1992 se presentó como candidato a senador y por poco casi gana.
Recopilación de la información y Estructuración por Antonio Jimenez.
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